La habitación que nos dieron era enorme, y contaba con un dormitorio, un amplio baño, un balcón. La ubicación era céntrica y fantástica, en el centro de París. estaba cerca de paradas de metro, bares, restaurantes y supermercados.

La ubicación es magnífica, a escasos 500 m de la parada de metro Anvers, próximo a Pigalle donde se localiza el Moulin Rouge, al barrio de los pintores y la basílica Sacre Coure. La zona es muy tranquila, ideal para el descanso después de un largo día de caminata a pie. Tuvimos la suerte de alojarnos en la Suite 61 con una maravillosa decoración que te transporta al París más romántico y seductor. La habitación estaba dotada con todo tipo de comodidades (vestidor, tv de pantalla plana, cama muy confortable y amplia, accesorios de baño, hervidor eléctrico, minibar, equipo de planchado y algo muy importante... Cada día cambian las toallas y la limpieza es diaria e inmejorable). El personal fue muy amable en todo momento y no resultó nada difícil comunicarnos con ellos en inglés. Si en alguna otra ocasión visitáramos la Ciudad de la Luz, sin duda volveríamos a alojarnos en este hotel. We love París & Alba Opera.

Habitaciones con un sofá cama.

Las habitaciones son encantadoras y recién remodeladas, con una bañera. El personal es extremadamente servicial y muy amable. Ubicación fácil cerca de un restaurante, servicios muy buenos y una cama de buen tamaño.

Una habitación impecable y muy espaciosa con un dormitorio y con un amplio baño, una ubicación estupenda.

La localización, una vez conocida, resulta tranquila y a la vez bien localizada

Las dependencias comunes y personal sin muchos idiomas y sin muchas facilidades para informacion turistica

El hotel está muy bien ubicado, a pocos minutos de Montmartre y de la ópera. El diseño del hotel y su ascensor son destacables. Nuestra habitación del último piso era abuhardillada y encantadora.

Me sentí muy acogido, no tengo ninguna pega.

El hotel esta relativamente centrico.

Las decoracion y esta un poco viejo

Los servicios eran excelentes. La habitación era recién remodelada y encantadora y pequeña, con un minibar, un salón y una cocina pequeña. El hotel tenía una ubicación super céntrica y estaba a un par de manzanas de la Estación de Anvers.

El hotel es único y familiar, perfecto para una estancia corta en París. La habitación es encantadora, de buen tamaño y cuenta con una cocina y un hervidor de agua. Los servicios son muy buenos, y dispone de un restaurante pequeño.

Hotel muy recomendable, bien situado para visitar la ciudad tiene varias lineas de metro cerca. El personal es agradable y educado.

La ubicación es excelente, muy cerca del Sacre Coeur y de muchas tiendas y supermercados. Es un lugar perfecto para explorar la ciudad. Además, el hotel es muy acogedor y su diseño es original y encantador. El ascensor es una de las cosas más destacables.

Recomiendo este lugar insistentemente.

Las habitaciones son de buen tamaño y tienen un minibar, salón y una pequeña cocina. La ubicación es conveniente y se puede llegar fácilmente desde el aeropuerto Paris Orly en 30 minutos en coche.

Este lugar está súper limpio y tienen un servicio excelente, además el personal es súper amable 😊.

Amplitud y limpieza.

Nulo menaje en cocina en la Junior Suite